

Desde este espacio expreso gratitud a Dios por la oportunidad que me da de servirle en el honroso cargo de moderador de la IPC, con humildad y compromiso de servicio asumimos esta gran responsabilidad, que tendrá como misión especial liderar los procesos enmarcados en el Plan Estratégico de IPC, para el quinquenio 2011-2015, a partir de cuatro ejes: Eclesial, Educativo, Social y Mayordomía.
Cada eje se convierte en una plataforma para direccionar el trabajo de la IGLESIA PRESBITERINA DE COLOMBIA durante los próximos cinco años, trabajo que debe ser asumido desde cada uno de los presbiterios, que son los que en última materializan las proyecciones de la iglesia nacional.
Hoy más que nunca tenemos que unir nuestros dones, mirarnos como un todo, movidos por el mismo Espíritu, con una misma esperanza, porque a pesar de las particularidades de cada presbiterio, nos encontramos en la misión, con un compromiso social y vocación de servicio.
Nos encontramos ante una nueva manera de pensar y actuar, ante una mirada diferente del mundo. Nuevas realidades con nuevos retos a la misión tradicional fuera de nuestros límites. Cada día nos encontramos con gentes de otras culturas y de experiencias religiosas diferentes, en este mundo cambiante, en donde el mundo abre nuevos horizontes a la misión, la iglesia está llamada a esa apertura, producto de un mundo globalizado, no solo estamos nosotros, sino que también hay otros (as) con los cuales nos podemos encontrarnos en la misión.
Desde luego, estamos desafiados y desafiadas a hacer más visible una iglesia que por más de un centenar y medio de años, ha venido trabajando en favor de las comunidades marginadas de Colombia, en este contexto en donde se agudiza la crisis social de nuestro país, reflejada con más desplazados, más desempleados, una Ley de víctima incierta, que no garantiza una verdadera restitución de tierras y por último la firma de un TLC con los Estados Unidos, nos ubican en un panorama bastante oscuro, allí indiscutiblemente debe ser más audible la voz de la iglesia, estamos llamados y llamadas a denunciar todo acto de injusticia que atenta contra dignidad humana, propender por una vida digna y abundante.
“En fin, el fruto de justicia se siembra en paz para aquellos que hacen la paz” Santiago 3:18.
Pbro. Gobernante Jesús Vargas Cuesta
Moderador IPC. 2012-2013.
“El espíritu del señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a pregonar libertad a los cautivos, a dar vista a los ciegos; a poner en libertad a los oprimidos; a predicar el año agradable del señor” Lucas 4:18-19